Durante el gobierno de Gabriel Pereira (1856-1860), la Junta de Montevideo ocupaba la casa N° 194 de la calle Sarandí, entre Misiones y Treinta Tres, actualmente desaparecida. Luego se instaló en la esquina de Sarandí y Zabala, en la antigua residencia de Pedro Sáenz de Zumarán. Se trasladó desde allí hasta la calle 25 de Mayo esquina Cámaras, hoy Juan Carlos Gómez, actual sede de la Junta Departamental de Montevideo.
A fines del siglo XIX, debido a las crecientes necesidades del organismo municipal causadas por el desarrollo de Montevideo, se mudó al «Palacio Jackson». Éste se encontraba ubicado en la Plaza Cagancha, en su extremo suroeste sobre 18 de Julio. Había sido mandado edificar por Emilio Reus y proseguido por Juan Jackson. Fue demolido en la década de 1970. Finalmente, la sede municipal se trasladó al predio ubicado en el linde del antiguo ejido colonial, en el par de manzanas comprendidas entre la Avda. 18 de Julio y las calles Ejido, Santa Lucía (hoy Santiago de Chile) y Soriano.
El sitio perteneció a fines del siglo XVIII a José Andrés Lamas Bermúdez, quien vivió con su familia hasta su muerte en 1805. Luego las tierras quedaron abandonadas hasta que en 1818 fueron donadas al sacerdote portugués Manuel Salinas, encargado de la Iglesia del Cordón. En 1825 Salinas vendió sus terrenos al inglés John Hall y tres años más tarde éste lo vendió a una comisión de residentes británicos con destino a instalar un cementerio exclusivo para la colectividad inglesa. Fue habilitado en 1837 y funcionó allí hasta su traslado en 1873.
El 1° de octubre de 1884 se dictó la ley de expropiación de esas tierras y hacia 1890 se cumplieron los trabajos de aplanamiento y nivelación, siendo utilizado como Plaza de Armas para ejercicios de instrucción militar. Posteriormente, con el nombre de «Pabellón Nacional», fue sucesivamente escenario de teatro cómico, exposiciones ganaderas y agrícolas, remates de animales, entre otras funciones. En 1910 empezó la construcción del Palacio de Gobierno, destinado a servir de sede a los tres Poderes del Estado, pero las obras fueron detenidas por decisión de la administración del segundo gobierno de José Batlle y Ordóñez (1911-1915). El Poder Ejecutivo transfirió este terreno al dominio municipal el 4 de enero de 1915, aunque formalmente se efectivizó recién el 8 de julio de 1981.
En 1923 se llamó a concurso en primer grado internacional de anteproyectos para la construcción del Palacio Municipal, pero el jurado declaró desierto el primer premio y otorgó el segundo al arquitecto Mauricio Cravotto (1893-1962). Su proyecto cumplía con la exigencia de aprovechar los cimientos existentes del Edificio de los Poderes Públicos, no concluido. En 1929 se realizó otro concurso , esta vez nacional y a dos grados: idea y desarrollo, obteniendo el primer premio Cravotto. El 6 de enero de 1935 se colocó la piedra fundamental del Palacio Municipal, y días más tarde comenzaron las obras. Éstas se realizaron en varias etapas, construyéndose diez pisos y medio en semipisos, equivalentes a veintiún pisos. En principio, las dimensiones de la torre serían de 114 metros de altura, pero en 1940 el intendente Horacio Acosta y Lara resolvió, por razones de orden financiero, su reducción, pasando a tener 77,65 metros.
El edificio fue habilitado el 7 de abril de 1941, pero e l nivel de avance de la construcción permitió la realización del «V Congreso Panamericano de Arquitectura» en 1940.
En 1942 se construyó la explanada, el garaje del subsuelo y el puente que la unía con la torre. Entre 1944 y 1946 se construyeron las alas laterales sobre Ejido y Santiago de Chile, y en 1948 se inició la construcción del Atrio Municipal, en el sector con frente a la Avda. Dieciocho de Julio. El 7 de abril de 1958 fue trasladada a la Explanada del Palacio Municipal la copia de la estatua «El David» realizada por Miguel Ángel Buonarotti (1475-1564), que inicialmente estaba ubicada en la intersección de la Avda. Gral. Rivera y las calles Juan D. Jackson y Arenal Grande. Cravotto colocó dicha estatua como homenaje simbólico al origen italiano de los municipios, por tal motivo, se encuentra sobreelevada en cinco escalones y a la izquierda respecto a la fachada, como la original del Palacio de la Señoría de Florencia.
Años más tarde, el 26 de junio de 1963, se colocó en el costado este de la Explanada Municipal, una estatua ecuestre en homenaje a Erasmo de Narni, llamado «Il Gattamelata», condotiero italiano. Era la réplica del original de Donatello (1386-1466). Luego fue llevada al Depósito del Servicio de Paseos Públicos, a la espera de una nueva ubicación.
En 1979 se inauguró el «Complejo Panorámico», compuesto por cuatro pisos que comprenden: mirador, cafetería, restaurante y oficinas. Finalmente, como una de las últimas etapas, entre 1 980 y 1982, se revistió la torre con plaquetas cerámicas. «Sabía yo que la visión de un edificio no es siempre completa. Diríamos que su masa se insinúa, que ofrece sugestiones. Y hasta podría afirmarse que tiene un ‘don de gentes’ dentro de la edificación urbana.» (1) (Mauricio Cravotto)
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