La Parva Domus, autoproclamada «República» independiente, es una curiosa y colorida micronación ubicada en Montevideo, Uruguay. Fundada el 25 de agosto de 1878, esta singular entidad se ha mantenido como un espacio dedicado al esparcimiento y a la vida social de sus miembros.
Fundación y Primeros Años
La historia oficial de la Parva Domus relata que su fundación ocurrió en las primeras horas del 25 de agosto de 1878. A las cuatro de la mañana de ese día, se izó por primera vez la bandera de la Parva Domus, marcando así el día de su independencia. Esta fecha coincide con el Día de la Independencia de Uruguay, lo que subraya el espíritu festivo y nacionalista de esta micronación.
Estructura y Organización
Al igual que otras micronaciones, la Parva Domus cuenta con una estructura de gobierno ficticia que imita a la de un estado soberano. Sus miembros, conocidos como «ciudadanos», ostentan títulos rimbombantes y participan en ceremonias y eventos donde se otorgan «honores» ficticios. La micronación tiene su propio «gobierno» y «gabinete ministerial», así como una activa «diplomacia» que refuerza sus lazos sociales y culturales tanto dentro como fuera de sus fronteras.
Propósitos y Actividades
El principal propósito de la Parva Domus es ofrecer un espacio para el entretenimiento y la vida social de sus miembros. A lo largo de los años, se ha convertido en un lugar de encuentro para diversas generaciones de uruguayos, donde se celebran eventos culturales, deportivos y sociales. Esta micronación se destaca por su ambiente de camaradería y humor, promoviendo la participación activa y el sentido de comunidad entre sus ciudadanos.
Importancia Cultural
La Parva Domus es un ejemplo notable de cómo las micronaciones pueden servir como espacios de creatividad y diversión. Su longevidad y su capacidad para adaptarse a los tiempos reflejan su importancia en la cultura local de Montevideo. Además, su existencia añade un elemento de fantasía y juego a la vida cotidiana, demostrando que las fronteras de la nación pueden ser tanto físicas como imaginarias.
A continuación dejamos un articulo publicado en la revista Rojo y Blanco del año 1902 donde nos relatan como fue el aniversario numero 23 de la Parva Domus.
Válgame Dios! Una vez más estamos frente á frente de estos incorruptibles parvenses, que nos arrastran y nos llevan hacia esa república, declarada libre é independiente por la voluntad absoluta de sus hijos, sin tratajos que la garantan, y sin más fuerzas que las suyas propias, constituidas por una brigada de infantería, una de caballería y apenas dos ó tres cañones de mala muerte!
Estuvimos el domingo en ella: estuvimos, examinamos y palpamos. Aquello es… lo que es! Allí hay pueblo, allí hay gobierno democrático, allí hay luz, aire y libertad,-tanta libertad como luz y como aire! El aire no se enrarece, la luz no se amortigua; la libertad tiende sus alas sobre uno y otra… Se vive con aire y luz en pleno ambiente republicano! Esa fiesta del domingo, de la que apenas hemos salido, es la más grande demostración de lo que puede hacerse en materia de asociaciones en nuestro país. Contamos desde luego, con objeciones respecto al carácter de las fiestas de la Parva. Pero las tenemos contestadas de antemano: lo que en la Parva ocurre, no ocurre en parte alguna de la República, — porque en ninguna parte se logra reunir elementos tan heterogéneos así en política como en religión y aun en sociabilidad, que marchen más de acuerdo —durante las horas parrenses— llamémoslas así y concurran con igual entusiasmo al fin social concretado en la fórmula: —P. D . M. Q— Las cuatro letras que adornan elestandarte social tienen su iman que provoca con la jovialidad expansiva el acercamiento de los hombres á los que demuestra evidentemente que es posible encontrar nobleza y generosidad de alma en la humilde y honrada choza.
Es este, en efecto, el lema de la Parva cuyo fundador —Pepe Achinelli— la contempla ahora desde afuera, en su enorme progreso, sin que se le vea ocupar el sitial que sus méritos le tendrían asegurado. Tenemos para él estas palabras, porque recordamos bien nuestra primera visita á la Parva:—un par de cuartujos de paredes negras, á las que se recostaban innumerables cañas de pescar y aparejos y medio-mundos ó reds, algunos platos de lata, dos ó tres cacerolas, una olla grande… y pare usted de contar. Se nos obsequió entonces en aquella choza con el gran corazón de sus dueños:—junto á Pepe Achinelli estaba el hoy presidente de la Parva,—Juan Turenne.
Pero volvamos á la fiesta del domingo, repitiendo que estuvo soberbia, desde que trescientas cincuenta personas de todas las clases sociales y políticas se sentaron á su mesa, sin que hubiera una sola nota discordante. Por el contrario, en el concierto después de la comida, todas las notas fueron de buena calidad vocal é instrumental, según las crónicas de los diarios.
Solo nos resta decir en el 23°aniversario de la República Parvense:—Adelante! que el lema P.D.M.Q perdure; que ninguna de sus simbólicas letras tambalee!
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